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Vista general de Sant Pere Màrtir de Sant Romà d’Abella

Identificador
25115_11_001
Tipo
Formato
Fecha
Cobertura
42.139604, 1.043486
Idioma
Autor
Daniel Altisent
Colaboradores
Sin información
Edificio (Relación)

Sant Pere Màrtir de Sant Romà d’Abella

Localidad
Sant Romà d'Abella
Municipio
Isona i Conca de Dellà
Provincia
Lleida
Comunidad
Cataluña
País
España
Ubicación

Sant Pere Màrtir de Sant Romà d’Abella

Descripción

ISONA I LA CONCA DELLÀ

Iglesia de Sant Pere Màrtir de Sant Romà d’Abella

La iglesia de Sant Pere Màrtir se sitúa en el pequeño arrabal de les Masíes, en Sant Romà d’Abella, sobre un punto dominante del pueblo, al cual se llega por la carretera C-1412b, desde Isona en dirección a Tremp.

En 1100 el señor Guillem Guitard de Caboet hizo testamento a favor de su hijo Bernat, a quien infeudó el castillo de Sant Romà d’Abella, del cual se conservan todavía algunos de los vestigios en la parte alta del pueblo. Lamentablemente, no han llegado a nuestros días referencias históricas sobre la iglesia.

Se trata de un edificio de una sola nave cubierta con bóveda de cañón que arranca de una sencilla imposta biselada, y una cabecera formada por un ábside semicircular ultrapasado. Éste se abre a la nave por medio de un arco presbiteral doble que también presenta una forma ultrasemicircular, de perfil de herradura. Llama la atención el friso de piedras dispuestas en forma triangular que corona el ábside en su exterior, un recurso ornamental utilizado también en el campanario de la cercana iglesia de Sant Esteve de Abella de la Conca. La ventana del ábside es de arco de medio punto monolítico, doble derrame y antepecho inclinado.

La puerta de entrada se halla en la fachada occidental, la cual está coronada por un campanario de espadaña de dos ojos situados sobre un vano formado por un arco apuntado, el cual, se transforma en un óculo en el interior del templo. Entre este vano y la portada se abre una ventana cruciforme.

En el exterior, se utiliza un aparejo irregular, que alterna sillares de tamaño pequeño en el ábside y el sector este de la nave, con sillares de piedra toba en el resto del edificio. En el tramo oriental de la nave, una ruptura en el muro evidencia la existencia de dos secuencias constructivas. Es probable que el templo, construido a finales del siglo xi, fuera reformado durante la centuria siguiente, momento en que se realizaron la cabecera y las bóvedas. 

                                       Texto y fotos: Daniel Altisent - Planos: Sonia Urbina Sampedro

Bibliografía 

Bertrán Cuders, J., 2007, pp. 69-70; Catalunya Romànica, 1984-1998, XV, pp. 410-411; Fité i Llevot, F., 1986, II, pp. 845-847; Vidal Sanvicens, M. y Vilaseca López, M., 1994,  pp. 372-376.