ARTESA DE SEGRE

Santuario de la Mare de Déu de Refet

Desde el santuario de Nostra Senyora de Refet, emplazado 2 km al norte de Seró, a los pies del Puig del Grealó y de la sierra de la Força, se divisa una amplia panorámica del valle del Senill.  El acceso se realiza por una pista asfaltada.

La primera referencia documental de Refet data de 1133, cuando Pere Ramon, un habitante procedente de Grealó, citó dicho lugar como un legado de sus padres. En 1716, en un libro de visitas pastorales del obispado de Urgell, aludía a una ermita construida y fundada en el término de Seró, cuyo altar estaba dedicado a Nuestra Señora de Refet. Hasta 1986 residió una pequeña comunidad de monjes benedictinos de la congregación de Nuestra Señora de la Esperanza. En el dintel de la portada del santuario aparece la fecha de 1765, que corresponde al momento de la construcción del edificio actual, elevado sobre el anterior. El monasterio cuenta con la reposición de una copia de la imagen de la Virgen de Reset, pues la original es custodiada por vecinos de la localidad de Seró, los cuales se negaron a que el obispado de Urgell se hiciera cargo de la escultura y de su posible traslado a un museo.

Talla de la Virgen de Reset

Se trata de una talla románica de madera de unos 60 cm de alto. Como consecuencia de su lamentable estado de conservación provocado por las humedades y los malos tratos que sufrió durante la Guerra Civil Española fue sometida a un proceso de restauración consistente en el saneamiento de la madera y la aplicación de un repinte muy elemental. Dicho proceso ocasionó la pérdida de la expresión primitiva de la escultura. La imagen es del tipo Sedes Sapientiae de tradición bizantina, donde la Virgen se convierte en el trono viviente de Dios. La Madre se representa sentada en un sitial, con forma de trono pero sin respaldo ni cojín, en posición rígida y frontal con el Niño sentado en el centro. Jesús se representa frontalmente, con su mano derecha bendiciendo. Sus rostros son muy esquemáticos, con los ojos almendrados y la boca con gesto solemne y serio, sin que se manifieste ningún tipo de contacto o comunicación entre ellos. Sus vestimentas, que carecen de pliegues, permanecen rígidas en sus cuerpos, y no muestran ninguna intención de movimiento. Estilísticamente, la imagen presenta rasgos populares en la fisonomía de la Virgen y en las desproporciones anatómicas que se evidencian en el brazo derecho tanto del Niño, como de la Madre. La talla es uno de los escasos ejemplos que se han conservado de escultura románica en la comarca de la Noguera. Se trata de una pieza de datación tardía, de finales del siglo xii, o con mayor probabilidad, del siglo xiii.

Texto y foto: Helena Soler Castán

Bibliografía

Catalunya Romànica, 1984-1998, XVII, pp. 200-201; Pijoan i Cluet, J., 1992, pp. 95-99.