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Escena juglaresca en una dovela

Identificador
40422_01_001
Tipo
Fecha
Cobertura
Sin información
Idioma
Autor
Raimundo Moreno Blanco,José Manuel Rodríguez Montañés,Ignacio Hernández García de la Barrera,Carlos Álvarez Marcos,Clara Martín García
Colaboradores
Sin información
Edificio Procedencia (Fuente)

 

País
España
Edificio (Relación)

Iglesia parroquial

Localidad
Otero de Herreros
Municipio
Otero de Herreros
Provincia
Segovia
Comunidad
Castilla y León
País
España
Descripción
EN LA CARA OCCIDENTAL DE LA SIERRA de Guadarrama –a más de 1100 m de altitud–, a unos 20 km de la capital, se emplaza esta localidad junto al que ha sido camino tradicional de comunicación con la otra vertiente de la formación montañosa y, por añadidura, con los terrenos ultra serram. Parajes de gran riqueza natural, regados por el río Herreros, que propiciaron el desarrollo de actividades ganaderas destinadas a abastecer a la industria pañera, de tanta importancia en la historia económica segoviana. Su origen parece hay que situarlo en un pequeño asentamiento, hoy despoblado, que bajo el nombre de Ferreros –según aparece en la documentación medieval– se situaba en terrenos próximos a su actual emplazamiento, cuya denominación se relaciona con la actividad metalúrgica –de la que aún quedan testimonios– que se estableció en la zona, no siendo hasta el siglo XV cuando se produjo el traslado al núcleo habitado en el día de hoy. De ese primitivo asentamiento se conservan los restos de lo que fue su templo, apenas unos paredones de calicanto, que bajo la advocación de San Pedro se situaban en un pequeño valle próximo. En el templo parroquial de la localidad, obra de envergadura que hay situar en el siglo XVI, se encuentran reutilizadas en una suerte de pórtico cegado del costado septentrional, una serie de piezas provenientes de algún edificio anterior. Se trata de cinco piezas de piedra arenisca, posiblemente pertenecientes a un arco, con decoración tallada en su frente con diferentes motivos. Así, se puede distinguir un florón de cuatro hojas, un ave, una pareja de pavos reales en disposición simétrica, una escena juglaresca de música y baile, rematando la serie la representación de un artesano. Si bien resulta aventurado, la presencia de un arco remontado –doblado en ambas caras– de medio punto, con columnas acodilladas y capiteles de temática vegetal en una propiedad particular del caserío de la localidad, que según me indican puede provenir de la desaparecida ermita de Cepones, hace pensar si no sería este mismo el origen de las piezas arriba señaladas.