Pasar al contenido principal
x

Vista general de la iglesia

Identificador
39094_43_003n
Tipo
Formato
Fecha
Cobertura
42º 46' 42.78'' , -3º 59' 27.73''
Autor
Sin información
Colaboradores
Sin información
Derechos
Edificio Procedencia (Fuente)

 

País
España
Edificio (Relación)

Iglesia de la Purísima

Localidad
Sobrepenilla
Municipio
Valderredible
Provincia
Cantabria
Comunidad
Cantabria
País
España
Descripción
ES UNA IGLESIA DE UNA SOLA NAVE, con ábside cuadrangular, del tipo de la de Montecillo. Es toda ella de buenísima sillería. La puerta modificada, es posterior, posiblemente de 1705, que es cuando se hace el pórtico con columnas, según inscripción a su entrada que dice Año 1705. Los canecillos del muro sur, han desaparecido por la colocación de las vigas del pórtico. El ábside, en su muro meridional, tiene siete canecillos: 1.- caveto liso; 2.- igual; 3.- de peces verticales en caveto; 4.- caveto; 5.- entrelazo; 6.- caveto; 7.- caveto. La cornisa es de caveto liso. La ventana del ábside, en este muro sur, es de medio punto sin chambrana. Tiene una arquivolta de baquetón con billetes pequeños y apoya en cimacios de caveto lisos. Los capiteles son historiados, muy toscos y bastante estropeados. El izquierdo, lleva caballero, con halcón al parecer, que se dirige hacia un gran pájaro que soporta encima, algo estropeado, no identificable. El capitel derecho, lo ocupa un monstruo con cola retorcida y patas de garras; sobre las patas anteriores una especie de nicho apuntado con un pájaro, fruta o tortuga en su interior. Las basas son de dos toros y escocia, enormemente desgastadas. La ventana de la cabecera del ábside (Este) no lleva columnas, sino tres baquetones desde abajo, que voltean un arco de medio punto; el baquetón central, más estrecho, es sogueado. Tiene aspillera, y el tímpano lleva trece medias bolas, con incisiones que forman una cruz. La cornisa del muro del hastial del ábside no existe, por lo tanto no hay canecillos, solo es un caveto. La espadaña es de dos troneras solamente y toda ella románica, perfectamente conservada. Llevan las troneras un guardapolvos sencillo de caveto. Lo más interesante es la cubierta de la espadaña, formada por piedras de perfecto encaje. Los laterales del piñón tienen dos canecillos de cuarto de bocel. Los canecillos del muro norte son: tres en la espadaña, de éstos uno parece fálico, con el miembro en erección, los otros de caveto. La nave tiene doce canecillos que son, de derecha a izquierda: 1.- de bolas; 2.- caveto; 3.- caveto; 4.- de proa de nave; 5.- de dos picos; 6.- caveto; 7 y 8.- caveto con dos salientes triangulares; 9.- proa de nave; 10.- caveto; 11.- dos picos unidos; 12.- caveto. El muro norte del ábside lleva siete canecillos todos lisos, de caveto. INTERIOR Tiene un ábside con bóveda de cañón apuntado, que apoya sobre imposta corrida en los laterales, de caveto sin decorar. En el frente hay una ventana con arco de medio punto y arquivolta de caveto con piñas y una bola. Esta arquivolta, apoya sobre capiteles decorados; el izquierdo, de especie de discos o fresas con orificios, sobre los que hay cuatro pomas; el cimacio es de estrías inclinadas. El capitel derecho, lleva piñas o frutos ovoides con caperuza; el cimacio, de incisiones inclinadas iguales que las del capitel opuesto. Ambas columnas llevan collarino fuerte. Las basas están muy bien hechas, finas, con dos toros y esferillas que unen los plintos. Existe una credencia, como nicho, en el muro derecho del ábside, y una estrecha ventana en aspillera, en el muro sur, que se corresponde con la descrita en el exterior, y que interiormente está también enmarcada por un fino baquetón sogueado. Los capiteles del arco triunfal son muy interesantes, aunque muy toscos y de la misma mano que talló la ventana exterior. Ambos apoyan en columnas dobles, con fustes monolíticos, no entregos. El capitel de la derecha, según se mira al altar, idea en la parte izquierda, dos figuras: una mujer desnuda, a la que muerden sus pechos dos serpientes que ella sujeta con las manos; esta mujer, de pie, apoya sus pies sobre una media figurilla horizontal. En el ángulo, gran piña. Girando la vista hacia la derecha, aparece la figura del demonio, con patas de tres garras, que apoyan en la cabeza de esa figurilla horizontal; el demonio, con cara grotesca, sujeta una balanza, intentando hacer inclinar a su favor el platillo que está a su lado; debajo de la balanza una especie de galgo o perro famélico. Siguiendo la vista, la balanza se ve sostenida por una figura de faldellín que pudiera ser San Miguel. A su derecha, ya mirando hacia la nave, una figura sentada que parece sostener una gran bolsa de su cuello, y ya en el extremo, otra figura demoníaca que intenta como sellarle la boca con su mano derecha, y sostiene en la izquierda una moneda. El cimacio es liso de caveto. El conjunto iconográfico del capitel, no parece dudoso que quiere representar, en vivo, los dos pecados capitales más destacados en la figurativa románica: la lujuria y la avaricia, separados por una escena muy repetida también en la temática medieval, referente al juicio de las almas en un tête a tête de San Miguel y el demonio. El capitel izquierdo lleva, de izquierda a derecha: un ave, con cabeza convertida en cuerpo de serpiente, que apoya sus patas sobre una figura de pie que alza los brazos y sujeta en su mano izquierda un bastón largo. El centro del capitel, lo ocupa una figura de pie que sujeta en sus manos un bastón que mantiene entre sus manos. A la derecha –ya hacia el ábside– una mujer desnuda, o sirena, abre sus piernas o cola sujetándoselas con las manos. Al lado de la cabeza, a la izquierda, hay un pájaro o gallo. En el extremo más derecho, cierra el capitel un animal escuálido, en vertical, que apoya sus patas traseras sobre la cola izquierda de la sirena. El cimacio es también liso de caveto. La significación del tema de este capitel se nos escapa. Las basas, son iguales a las de las columnas izquierdas. Destaca el carácter popular de la escultura existente en esta iglesia de San Martín de Sobrepenilla, muy lejos del bien hacer de los maestros tallistas románicos. Su cronología parece bordear los años finales del siglo XII o comienzos del XIII. La pila bautismal, colocada en el esquinal de la nave del evangelio, es de forma semiesférica sobrepasada.Se asienta sobre pie cilíndrico de baja altura que está recementado. Medidas: altura total, 90 cm; diámetro, 84; cuba, 63. Borde liso, sin decoración.