Identificador
39004_11_018n
Tipo
Formato
Fecha
Cobertura
43º 11' 59.64'' , -4º 2' 11.80''
Idioma
Autor
Esteban Sainz Vidal
Colaboradores
Sin información
Edificio Procedencia (Fuente)
País
España
Edificio (Relación)
Localidad
Santa Águeda
Municipio
Arenas de Iguña
Provincia
Cantabria
Comunidad
Cantabria
País
España
Descripción
ESTA CASI OLVIDADA ERMITA DE SANTA ÁGUEDA, en las proximidades del caserío de Bostronizo, adquiere cierto interés por guardar en su interior una pila bautismal que pudiera estar relacionada con el señorío de la Orden de San Juan de Jerusalén que, como hemos apuntado en líneas precedentes, tuvo una muy segura intervención en estas tierras de Iguña, posiblemente desde los años de Alfonso VII, que fue su principal protector, y consta que una de las iglesias pertenecientes al priorato de San Juan de Raicedo fue, en Iguña, la de Santa Águeda. Aún en su extrema sencillez, el edificio que ha perdurado hasta hoy día, no nos permite asegurar que pueda ser una pervivencia románica, aunque su elementalísima estructura pudiera encajarse en cualquier época. Pero ni en sus muros exteriores, cornisas, puertas, espadaña, etc., nada permite que, como en otros ejemplos, podamos afirmar un seguro alzado medieval. El aparejo utilizado es la humildísima mampostería, habiéndose servido de sillería para los vanos, puerta y reducidísima espadaña de una sola tronera. Ni un solo detalle escultórico, de reminiscencias románicas, nos puede servir para retrasar hasta el siglo XI-XII su lejana construcción. La puerta, que muchas veces nos ha servido al menos para intuir precedentes del medievo, aquí, aunque su arco sea de medio punto, sus enormes dovelas más nos inclinan a creerla de siglos posteriores. Sólo dos piezas talladas dos pilas bautismales una que ahora está colocada al exterior, a la izquierda de la puerta, y otra al interior; pueden hacernos pensar que en el solar de Santa Águeda pudo de antiguo existir una ermita. La pila de fuera, hoy convertida en pétreo jarrón de ramajes, es cilíndrica, de borde liso, y sin decoración alguna. Es tan sólo la cuba, sin basamento, y ella parece de tipo muy repetido en el románico. La otra pila, la que ahora está colocada en el ángulo interior del suroeste de la nave, es de tamaño mayor, semiesférica, también de embocadura no decorada. La copa es totalmente lisa, pero lleva en su frente, una cruz de Malta, en bajo relieve, lo que nos acerca al señorío de la citada Orden en este valle. La hipótesis sobre la posible situación antigua de estas pilas ya ha sido comentada en párrafos anteriores.