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Vista general de Sant Miquel d'Hortmoier

Identificador
17109_02_012
Tipo
Formato
Fecha
Cobertura
42.2974842,2.5390018
Idioma
Autor
Marcos Ojosnegros Marín
Colaboradores
Sin información
Edificio (Relación)

Sant Miquel d’Hortmoier

Localidad
Oix
Municipio
Montagut i Oix
Provincia
Girona
Comunidad
Cataluña
País
España
Ubicación

Sant Miquel d'Hortmoier

Descripción

Iglesia de Sant Miquel d’Hortmoier

 

La iglesia de Sant Miquel d’Hortmoier se halla en el valle de Beget, entre las imponentes sierras de Bestracà y Talaixà. El camino de acceso hasta este valle no es fácil y necesitamos un vehículo para circular por a los caminos de montaña. Para llegar al lugar debemos salir de la autovía A-26 entre Figueres y Olot por la salida que nos indica Oix (GIV-5221). Una vez allí, seguimos por el camino de Oix a Beget. A los pocos metros encontramos un camino a nuestra derecha por el que seguimos a lo largo de 7 km hasta cruzar el rio Beget y llegamos a un llano en el que aparece el edificio, a unos 5 minutos a pie.

 

El término de Horto Moder se menciona en el acta de fundación de la canónica de Santa Maria de Besalú (977) por parte del conde-obispo Miró II Bonfill. La iglesia ya aparece citada como in villa que vocant orto modario ipsa ecclesia in honore sancti Michaelis archangeli en el testamento del mismo conde (979), por el que cede sus propiedades al monasterio de Sant Miquel de Cuixà, propiedades que serian confirmadas por el Papa Sergio IV el año 1011. La iglesia reaparece como afrontación en una donación a Sant Pere de Camprodon de una tal Arsendis, en el año 1069. En el año 1094 se cita, también como afrontación, en la donación, por parte de Arnau Arnall, de una masía llamada Conill a Santa Maria de Besalú. La siguiente noticia aparece en la Rationes Decimarum Hispaniae de Girona de los años 1279 y 1280, en donde figura como ecclesia de Orto moreiro. Del mismo modo aparece en otro documento de 1348 por el que un tal Ponç hace homenaje al obispo de Girona a cambio de los diezmos de diversas parroquias, entre las que se halla Sant Miquel de Hortmoier. Por último, en el Llibre Verd de la catedral Girona figura que en 1362 el rector de la parroquia de Sant Miquel recibió las décimas por sus tareas.

 

La iglesia de Sant Miquel d’Hortmoier es un edificio sencillo de una sola nave cubierta con bóveda de cañón apuntada terminada a levante con un ábside semicircular cubierto por una bóveda de horno. El ábside está elevado con dos escalones y conecta con la nave mediante un arco triunfal apuntado que intercala dovelas de roca volcánica rojiza. Dispone de cuatro ventanas, todas ellas de doble derrame y arco de medio punto. La primera, en el ábside, se construye mediante grandes bloques de piedra volcánica y presenta un dintel es monolítico. Otras dos se abren en el alzado sur, mientras que la cuarta está en la fachada oeste. La puerta de acceso al templo se abre en este mismo muro oeste. Su abertura es rectangular, tipología que no es nada usual en el románico, por lo que se ha de considerar que responde a una fase posterior.

 

La fachada occidental se corona con una espadaña de dos vanos que ocupa toda la anchura del muro. En los lados norte y sur los alzados presentan, en el extremo oeste, un saliente vertical adosado al muro para contrarrestar las cargas del arco triunfal consistente en una estructura similar a un contrafuerte, aunque poco pronunciado. Alrededor de todo el edificio, excepto el muro occidental, se dispone una cornisa de caveto. El templo presenta dos tipos de paramento claramente diferenciados. Por una parte, el ábside, así como los sectores orientales de los muros laterales, intercalan piedra volcánica rojiza de notables dimensiones entre sillares irregulares de piedra calcárea dispuestos en hiladas a soga y tizón. Por otra parte, en el resto de los muros predomina un paramento a base de pequeños sillares bien labrados y dispuestos en hiladas. Este notable cambio de paramento desconcierta sobre las partes conservadas que se atribuyen al periodo del románico, aunque se ha dicho que la diferencia entre los diferentes tipos de aparejo se debe a una restauración que afectó la zona de la cabecera, dado que perviven fragmentos de muro absidal que responden a un tipo de construcción más ruda. Así pues, si nos centramos en la parte considerada románica y el tipo de aparejo que ostenta, el edificio se puede datar en el siglo xii.

 

Texto y Fotos: Marcos Ojosnegros Marín 

 

Bibliografía

 

Abadal i de Vinyals, R. d’, 1926-1952, II, pp. 390-392; Catalunya Romànica, 1984-1998, IV, p. 280; Monsalvatje y Fossas, F., 1889-1919, I, II, XI, XII, XVII; Murlà i Giralt, J., 1980, pp. 155-194; Murlà i Giralt, J., 1983; Rius i Serra, J., 1946, pp. 76, 89; Sala i Canadell, R. y Puigdevall i Diumé, N., 1977, p. 80.