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Exterior

Identificador
09340_01_003
Tipo
Formato
Fecha
Cobertura
42º 1' 28.90'' , - 3º 45' 50.69''
Idioma
Autor
Pedro Luis Huerta Huerta
Colaboradores
Sin información
Edificio Procedencia (Fuente)

 

País
España
Edificio (Relación)

Ermita de Nuestra Señora de Manciles

Localidad
Lerma
Municipio
Lerma
Provincia
Burgos
Comunidad
Castilla y León
País
España
Descripción
LA ERMITA ACTUAL era la antigua parroquia del despoblado de Manciles, situado a unos 5 km al noroeste de Lerma, al que se accede por la actual carretera de Palencia. Allí tuvo posesiones el monasterio de Villamayor de los Montes y en su cartulario encontramos algunas menciones. El lugar lo encontramos citado en una carta de venta realizada en 1211 a favor de Garcí Fernández, figurando entre los testigos un tal don Miguel, vecino de Manziles. Posteriormente, en 1228, aparece mencionado entre los bienes de dicho cenobio cuando éste fue adscrito a la Orden del Cister y al monasterio de Las Huelgas de Burgos. En ese mismo año el propio Garcí Fernández entregó a su hija Mayor García todo cuanto tenía en este término. En 1334 la abadesa de Villamayor, doña Berenguela Alfonso, arrendó por veinte años al judío de Lerma, don Moisés, “los mollinos que diçen de Mançiles, que sson en el dicho rrío Arlança”. En 1352 era behetría de Ruy Fernández de Tovar y de Pedro Ruiz de Villegas, teniendo por diviseros a don Nuño, don Pedro “e tres fiios de Rodrigo Perez de Uilla Lobos e Ferrant Rodriguez de Uilla Lobos e Garçi Ferrndez Manrrique e la nuger (sic) de Aluar Rodriguez d´Aça”. Se cita también en la relación de préstamos episcopales de 1515 y, ya como despoblado, a mediados del siglo XIX en la obra de Madoz. El templo que ha llegado hasta nuestros días es un edificio románico que ha sufrido numerosas remodelaciones y añadidos, como por ejemplo el actual pórtico o la dependencia que se adosa en el hastial. De la primitiva fábrica conserva la cabecera cuadrangular, realizada en mampostería. Ésta tiene un alero tanto en el lado septentrional como en el meridional que descansa sobre canecillos, la mayoría de ellos con forma de proa de nave o trazas geométricas, aunque hay algunos que presentan un barril, rollos y una pequeña cabeza antropomorfa. En el paño central de la cabecera se abre un vano formado por un óculo polilobulado -muy desgastado- y una moldura exterior con puntas de diamante. Sobre el arco triunfal se conservan restos de lo que fue la primitiva espadaña que tenía dos troneras. Esta disposición la vemos también en la iglesia de Avellanosa de Muñó. En el interior, presenta una sola nave con coro a los pies, techumbre de madera y paredes enfoscadas. La cabecera, a la que da paso un arco triunfal apuntado y doblado, está realizada en mampostería y sillarejo. Se cubre con una bóveda de cañón que arranca de una imposta lisa y se divide en dos tramos por medio de un arco fajón que apoya sobre ménsulas. Por las características descritas parece que nos hallamos ante una construcción tardía que bien pudo levantarse a finales del siglo XII o comienzos del XIII.