EL PONT DE SUERT

Iglesia de Sant Bartomeu de Erta

Al núcleo de Erta, un pequeño caserío en la cabecera del valle homónimo, se accede por una carretera con dirección a Malpàs que arranca en la N-260. Tras recorrer 3,5 km, un desvío conduce a Castellars, desde donde se toma una pista forestal que lleva hacia Erta.

A pesar de formar parte de los dominios del monasterio de Santa Maria de Lavaix desde el siglo x, la tenencia de Erta disputada por los señores de Sas, de hecho el pueblo es también conocido como Erta de Sas. A finales del siglo xi, el abad Ramon  Ramon y los hombres de Sas, poseedores del alodio de Erta, pactaron el pago de la décima al citado monasterio, de lo que se deduce que la iglesia de Sant Bartomeu ya existía por aquel entonces. En el siglo xii, ésta figuraba en el inventario de posesiones del cenobio, y de ella dependían los templos cercanos de Sant Romà de Massivert y Sant Tirs de Sentís. El templo formó parte del patrimonio de dicho cenobio hasta su desamortización.

Se trata un edificio de pequeñas dimensiones, cuya planta está compuesta por un ábside semicircular y una nave rectangular, a la que, posteriormente, se le añadieron una capilla en el muro norte y una sacristía en el sur. En este último lienzo se abren la puerta, formada por un arco de medio punto, y, sobre ella, una ventana cuadrangular, añadida en una reforma de época moderna. El frontispicio occidental está perforado por un óculo, y está coronado por una espadaña de doble ojo. La techumbre, de teja árabe, es de dos aguas sobre la nave y troncocónica sobre el ábside.

En el interior del templo, que se encuentra completamente encalado, la nave se cubre con una bóveda de cañón, algo deformada, la cual arranca de una imposta corrida de piedra toba y perfil biselado. El hemiciclo absidal queda oculto por un retablo fechado en 1714.

Se ha datado la construcción de este edificio entre finales del siglo xi y las primeras décadas del xii.

Texto: Nuria Otero Herráiz/Juan Antonio Olañeta Molina - Foto: Nuria Otero Herráiz

Bibliografía

Catalunya Romànica, 1984-1998, XVI, pp. 172-173; Puig i Ferreté, I. M., 1984, pp. 71-72, 89, 97-100 y 111-112.