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Vista general de la torre del Castillo de Almenara

Identificador
25003_02_001
Tipo
Formato
Fecha
Cobertura
41.7533, 1.06732
Idioma
Autor
Nuria Montoya Vives
Colaboradores
Sin información
Edificio (Relación)

Castillo de Almenara

Localidad
Almenara
Municipio
Agramunt
Provincia
Lleida
Comunidad
Cataluña
País
España
Ubicación

Castell de Almenara

Descripción

Castillo de Almenara

Del castillo de Almenara se conserva la torre, conocida popularmente como el pilar de Almenara, que es de planta circular y fue construida a finales del siglo xi. Se encuentra a unos 4 km al Sur de Agramunt, desde donde se llega por la carretera de Tornabous. Para acceder al lugar hay que recorrer un corto sendero que lleva hasta la torre, que se encuentra en el punto más elevado de la sierra de Almenara, la cual separa la cuenca del río Sió de la del Ondara. Desde aquí las vistas del Pla de Urgell son magníficas. 

 

El topónimo Almenara, de origen árabe, significa torre de vigilancia, y se utilizó comúnmente a partir del año 1000 para designar este tipo de fortificaciones. Así pues, parece ser que hubo una fortificación islámica en la sierra de Almenara que funcionaba como un punto de vigilancia hacia la frontera cristiana, y que se habría edificado sobre un antiguo poblado visigodo. Con el proceso de repoblación de estas tierras por parte de los caballeros del condado de Urgell, Almenara pasó a ser un elemento clave dentro del sistema defensivo cristiano. Debido a su estratégica posición, permitía la comunicación visual con el castillo de Agramunt, del que era subordinado. En su interior se podía refugiar una guarnición de unos pocos hombres, que controlaban el camino hacia la ciudad. La primera noticia histórica sobre Almenara se encuentra en una venta del castillo de Artesa por parte del conde Ermengol II y su esposa Belasqueta al caballero Arnau Mir de Tost en 1037. Seguramente, por aquel entonces Almenara estaba aún bajo el dominio musulmán. A pesar de que la conquista del valle del río Sió no finalizó hasta alrededor de 1070 por obra de Ermengol IV, con anterioridad a esta fecha ya hay noticias sobre Almenara y sus castellanos, elegidos por los condes de Urgell. Así, gracias a una donación de 1051 y su testamento una década después, se sabe que  Pere Miró de Pons fue el castellano de Almenara. Dos años después, el conde Ermengol III nombraba a Arnau Dalmau como castellano. Siete décadas después de la conquista de Ermengol IV, su nieto Ermengol VI y su esposa Elvira cedieron en 1139 a Ramon Arnau una torre en el término de Almenara para que levantase una fortaleza. En 1164 el castellano era Pere de Puigverd y tres años después lo era Ramon de Subirats. 

 

El pilar de Almenara es una torre cilíndrica de unos 15 m de altura, levantada sobre del sustrato rocoso. Tiene 7 m de diámetro y unos muros de casi 2 m de grosor, variable en con la altura. A unos 3 y 7 m del nivel del suelo se disponen dos series horizontales de mechinales. En el lado meridional del primer piso se encuentra, a unos 6 m de altura, la puerta de entrada, formada por un arco de medio punto, que es la única abertura de la estructura. La torre está dividida en tres pisos, que están cubiertos por cúpulas un tanto irregulares. Se puede acceder desde el primer piso a los superiores, pero no al nivel inferior, al que se entraba por un vano situado el centro del piso que ya no existe. Los demás niveles se comunican entre ellos mediante escaleras de mano metálicas colocadas durante la restauración. El interior de los recintos, debido a la disminución del grosor de las paredes, aumenta en anchura conforme se va ascendiendo. 

 

El aparejo utilizado en los paramentos está formado por sillarejo menudo, de longitud diversa, pero bastante homogéneo en su altura, dispuesto en hiladas bastante uniformes. 

 

A finales de los ochenta del siglo xx la Diputación de Lleida promovió las obras de restauración y consolidación, y tapó un gran boquete de más de 1 m ocasionado durante la Guerra Civil. Durante la restauración acometida en 1987 se encontraron y recuperaron restos metálicos y de cerámica pertenecientes a distintos momentos históricos. Asimismo, se documentó la presencia de un muro en disposición radial y de un foso semicircular que rodeaba parte de la torre. Ambos tendrían una función defensiva. La torre fue edificada durante el último tercio del siglo xi. Algunos estudios plantean que podría haber sido construida por maestros franceses o que hubiesen estado en contacto con ellos, los cuales, al servicio de caballeros catalanes, habrían comandado grupos de canteros autóctonos. Esta teoría se basa en la comparación formal de la torre r con otras obras francesas con medidas coincidentes. En cualquier caso, el pilar de Almenara sigue el modelo típico de la construcción de frontera conocida con el nombre de torre manresana, nombre que se debe a una torre situada en Prats del Rei, en la comarca de Anoia, la cual presenta estas mismas características de torre circular, con una puerta de entrada a unos 6-7 m, dividida en tres compartimentos y que estaba destinada a la defensa y, sobre todo, a la vigilancia. En la comarca de Urgell se encuentran otras torres cilíndricas de este estilo, como la de Guimerà y la de Verdú, ambas asociadas a una fortaleza. Otras torres, hoy desaparecidas, cercanas a Almenara eran las de Linyola y Juneda, en las comarcas del Pla d’Urgell y Les Garrigues respectivamente. 

 

Texto y fotos: Nuria Montoya Vives

 

Bibliografía

 

Altisent, A., 1993, pp. 27 y 35-37; Bellmunt, D. de, 1984, pp. 16-21; Bolòs i Masclans, J. et alii, 2002, pp. 29, 77 y 87-88; Catalunya Romànica, 1984-1998, XXIV, pp. 515-517; Duch i Mas, J., 1992; González Pérez, J. R., 1997; Miró i Rosinach, J. M. 1972; Miró i Rosinach, J. M., 1973; Pleyan de Porta, J. et alii, 1880, II, pp. 255-258; Pons i Serra, L., 1990, pp. 38 y 64-65; Puig i Ball, J., 2003, pp. 113-120.