Identificador
              19011_02_015n
          Tipo
          
      Formato
              
          Fecha
              Cobertura
              41º 2' 6.95'' , -2º 28' 1.19''
          Idioma
              
          Autor
          Ana Belén Fernández Martínez,Ezequiel Jimeno Martínez
              Colaboradores
          Sin información
              Edificio Procedencia (Fuente)
              País
              España
          Edificio (Relación)
              Localidad
              Cortes de Tajuña
          Municipio
              Alcolea del Pinar
          Provincia
          Guadalajara
              Comunidad
              Castilla-La Mancha
          País
              España
          Claves
          Descripción
              SE TRATA DE UN EDIFICIO que conserva partes originales  de tradición románica del siglo XIII, aunque tanto  en planta como en el interior ha sido bastante reformado  durante los siglos XVI y XVII. Se encuentra cercado  en el lado sur por un recinto murado de media altura que  va desde la espadaña hasta la cabecera, realizado a posteriori.  La planta original románica era de una sola nave rectangular  de poca altura, con espadaña a los pies y ábside  semicircular a poniente. Esta estructura se modificó en la  época de la ampliación: se elevó la altura de la nave, se  añadió un crucero que sobresale en volumen, se reconstruyó  la espadaña y una estancia más para sacristía en el  brazo sur del crucero. Se nota claramente la diferencia  entre las fábricas de las partes originales y las de las nuevas  dependencias del siglo XVI.  Es, por tanto, un edificio que se construyó originalmente  con muros de mampostería, con cadenas de sillar en  las esquinas y en el recercado de los vanos; conserva también  los canes de piedra, que se alojan bajo el alero del  ábside y de los muros norte y sur de la nave. En la panda  meridional se encuentra uno de los elementos originales  del templo, la portada románica, alojada bajo un moderno  pórtico de madera. Siguiendo las directrices del románico  rural, austero y muy sencillo, la portada se articula en torno  a un arco de medio punto, del que salen dos arquivoltas, la  interior, dovelada, la exterior, con escueta decoración de  bocel que continúa por el intradós. Se remarca el conjunto  por una chambrana lisa, típica del románico, que apoya en  una cornisa, como las arquivoltas, y éstas, a su vez, sobre  pilastras planas sin ningún tipo decoración adicional. Sobre la portada, el paramento meridional muestra el  alero recorrido por canes de tradición románica, que posiblemente  fuesen reutilizados después de la reforma de la  iglesia, igual que ocurre con los canes del muro norte,  siendo éstos de decoración geométrica, modillones de  rollo, de factura muy sencilla y tosquedad, que se asemejan  a la talla de los encontrados en otros templos cercanos,  como Luzaga o Villaverde del Ducado. La diferencia de  volúmenes al exterior se percibe claramente con la altura  del crucero y de la sacristía, de época posterior a la románica,  cuya fábrica es de mampostería rematada por una  cornisa moldurada. El ábside semicircular, vestigio de la  primitiva iglesia, queda casi encerrado por dos de sus lados  al adosarle dichas dependencias posteriormente. Ha perdido  el cuerpo del presbiterio por la disposición de los  brazos del crucero en las pandas norte y sur. Tan sólo se  observa del ábside la parte más oriental, en la que se aprecia  el mampuesto de su muro revocado en sucesivas restauraciones,  y un reducido vano central de medio punto  abocinado al interior, que se encuentra cegado. Remata el  ábside en una línea de canecillos de idéntica tipología que  los descritos anteriormente. Finalmente, a los pies de la iglesia se encuentra la  espadaña triangular, reformada sobre la románica. De dos  cuerpos, el inferior hasta la altura de la nave, de diferente  fábrica que el superior, en el que se abren dos vanos de  medio punto para las campanas, cerrándose todo el cuerpo  por los tres lados restantes.  Al interior la iglesia no presenta muchas novedades; la  nave rectangular tiene sus paramentos lisos revocados en  yeso con el único soporte para la techumbre que el de los  propios muros. La cubierta, a modo de artesa, se realiza en  madera, con dobles tirantes apoyados sobre ménsulas. La  cubierta acaba donde se abre paso el arco triunfal del cru-  cero de medio punto, apoyado sobre pilastras. A ambos  lados se sitúan los brazos del crucero, donde se abren sendas  capillas con altares barrocos y cubierta de bóveda de  arista. Ya en la parte central del crucero, correspondiente  al cimborrio, se cubre con una cúpula poligonal que se  apoya en parte del muro del ábside, que queda reducido a  un tercio de su amplitud. Finalmente, ocupando el hemiciclo,  se halla un retablo del siglo XVI dividido en tres calles  y tres cuerpos, en los que se disponen unas interesantes  tablas pictóricas que reflejan pasajes de la vida de Cristo,  entre los cuales sobresalen los de la Presentación y la Crucifixión,  en la calle central.