Identificador
40513_01_002
Tipo
Formato
Fecha
Cobertura
41º 21' 50.37" , -3º 25' 50.61"
Idioma
Autor
Ignacio Hernández García de la Barrera
Colaboradores
Sin información
Edificio Procedencia (Fuente)
País
España
Edificio (Relación)
Localidad
Aldealázaro
Municipio
Ribota
Provincia
Segovia
Comunidad
Castilla y León
País
España
Claves
Descripción
LA SITUACIÓN DE ABANDONO de esta localidad, que ya en 1985 aparecía sin ningún vecino, afecta también al templo; ubicado en el extremo septentrional de lo que queda del caserío, a la vista del estado del mismo y por extensión de su iglesia, incluir su referencia en estas páginas viene justificado por dejar recogida su situación en los días que corren, siendo el recuerdo de las palabras que Madoz dedicó a esta localidad testimonio de una realidad no carente de cierta crueldad poética, “(...) casas de un solo piso y mala construcción, sin formar calles ni plazas”. Cerrada y abandonada, la iglesia de San Miguel Arcángel al menos se mantiene en pie, presentando un lamentable aspecto exterior, fiel reflejo de lo conservado en el interior. Templo de una nave y cabecera recta, no conserva en su exterior huella de su pasado más remoto; el interior también debió verse muy alterado y hoy, vacío, convertido en escombrera y refugio de fauna, luce la mayor de las vergüenzas. Conserva sin embargo, la que fue portada meridional, la cual a pesar de estar embadurnada de la tierra roja tan abundante en esta comarca y que da nombre a los pueblos, todavía deja ver los motivos que la adornan. Esta portada dispuesta en saledizo se compone de un arco doblado de medio punto trasdosado por una chambrana de perfil abiselado que parece lucir motivo de entrelazo. Los dos arcos presentan idéntica composición a partir de un perfil baquetonado que moldea la arista y una decoración de bolas que recorre todo el dovelaje; el arranque de estos arcos se produce a partir de una línea de imposta que sirve de transición entre aquellos y las jambas en las que apean; esta imposta, de listel y chaflán, está tallada en su parte inferior, luciendo motivo de tacos. Por su parte, las jambas internas continúan el perfil señalado por la arquivolta y ven cómo dos boceles recorren toda su altura, tanto por el exterior como por el interior, careciendo las jambas externas de estas molduraciones. Todo el conjunto del saledizo aparece enmarcado por una imposta, también con motivo de bolas.