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Vista desde el noroeste de Santa Llúcia de Puigmal

Identificador
17167_07_020
Tipo
Formato
Fecha
Cobertura
42.21644, 2.35717
Idioma
Autor
Martí Beltrán González
Colaboradores
Sin información
Edificio (Relación)

Santa Llúcia de Puigmal

Localidad
Sant Joan de les Abadeses
Municipio
Sant Joan de les Abadeses
Provincia
Girona
Comunidad
Cataluña
País
España
Ubicación

Santa Llúcia de Puigmal

Descripción

Iglesia de Santa Llúcia de Puigmal

 

En los límites del término municipal de Sant Joan de les Abadesses, concretamente en su vertiente suroriental, donde se halla el idílico emplazamiento del valle de Bianya, la iglesia de Santa Llúcia de Puigmal se encuentra a unos 900 m de altura entre las confluencias de las rieras de Torrents y de Santa Llúcia. Para llegar hasta el templo hay que coger la carretera GI-521, que lleva a Olot desde la localidad sanjuanina, tomando un desvío a mano izquierda en el collado de Sentigosa. Desde ese punto se sigue una pista forestal durante unos 3 km hasta llegar al templo, que se encuentra junto al camino y cerca de una fuente conocida por el mismo nombre.

 

Como se desprende de la documentación notarial de la parroquia, Santa Llúcia de Puigmal estaba adscrita en origen al obispado de Girona, en el que se mantuvo hasta el siglo xvii, cuando pasó a depender de la diócesis de Vic. El cambio diocesano se produjo entre 1622, cuando la iglesia es documentada por última vez en el obispado gerundense, y 1636, cuando se documenta una primera visita pastoral del obispo ausetano. El motivo de este cambio de demarcación eclesial fue debido al dominio que los monasterios de Santa Maria de Ripoll y Sant Joan de les Abadesses ejercieron sobre la iglesia, lo que debió propiciar, aunque tardíamente, su dependencia de la sede ausetana.

 

La historia del lugar de Puigmal (Podio Malo, Pojomalo o Pogium Malum, como es denominado en las diferentes fuentes) se remonta hasta el siglo ix, cuando aparece mencionado en la dotación de la iglesia de Sant Pere de Ripoll. En su acta de consagración del año 890 se menciona la existencia de la demarcación territorial carolingia de villa Pojomalo, aunque sin dar ningún tipo de indicación en cuanto a la existencia de un templo. La primera mención a la iglesia aparece en un documento del año 913, en el cual la abadesa Emma del monasterio de Sant Joan define el emplazamiento de un alodio de Podio Malo de Santa Lucia. En el año 982 vuelve a aparecer una mención a dicho alodio en la documentación notarial. En este caso, el rey franco Lotario otorga un precepto al monasterio de Santa Maria de Ripoll, que pasa a ostentar la posesión del alodio de Pogium Malum. Sin embargo, la conexión con el cenobio sanjuanino continúa con el acta de consagración de su iglesia abacial, que en el año 1150 reconoce entre sus propiedades la ecclesiam Sanctae Luciae de Podiomalo.

 

En el siglo xii se acometieron obras para modernizar el antiguo templo carolingio, que tuvieron como resultado el aspecto que, con alguna modificación, ostenta la iglesia en la actualidad. En el año 1165 se consagró el nuevo templo con la presencia de Ponç de Monells, obispo de Tortosa y abad de Sant Joan de les Abadesses, como se deduce de las noticias que ofrecen los historiadores eclesiásticos Josep Masdeu y Emili Riera. El templo pasó a depender definitivamente del monasterio de Sant Joan en 1351, año en el que se documenta su compra al rey Pedro el Ceremonioso. Durante el siglo xvii, la parroquia de Sant Llúcia de Puigmal pasó a ser sufragánea de Sant Julià de Vallfogona, situación que se perlongará hasta el siglo xix, cuando pasa a depender definitivamente de Sant Joan de les Abadesses.

 

La iglesia tiene una planta rectangular de nave única, en la que sobresale un ábside semicircular en su cabecera, iluminado por una ventana de derrame doble en su parte central. La iluminación del templo original se completaba con una ventana de derrame doble en el muro meridional. La nave está cubierta con bóveda de cañón y la habitual bóveda de cuarto de esfera que cubre la zona del ábside. La entrada se encuentra en el muro meridional, con un arco de medio punto formado por grandes dovelas y que probablemente pertenecía al templo original. Ya en época moderna, el templo ha sido provisto de un techo de dos aguas cubierto con tejas de cerámica, para protegerlo de las inclemencias del tiempo de la alta montaña. También son añadidos posteriores el campanario de espadaña que lo corona, y la ampliación de la nave hacia el Oeste. El aparejo de tamaño grande y bien tallado pertenece al tipo más extendido en el románico catalán durante el siglo xii, característica que apunta, con alguna excepción como el campanario, a que el edificio conservado es el templo construido para la consagración documentada en el año 1165. Actualmente, Santa Llúcia se encuentra en buen estado gracias a una reciente restauración.

 

Texto y fotos: Martí Beltrán González – Planos: Conchita Ruiz Terradillos

 

 

Bibliografía

 

Catalunya Romànica, 1984-1998, X, pp. 410; Ferrer i Godoy, J., 2009, pp. 162-164; Junyent i Subirà, E., 1945-1952a, p. 127; Montsalvatje i Fossas, F., 1910, pp. 132-133; Ordeig i Mata, R., 1993-2004, III-2, pp. 193-194; Santanach i Llagostera, M. D., 1997, pp. 46-47; Udina i Martorell, F., 1951, pp. 457.