Identificador
37110_05_002
Tipo
Formato
Fecha
Cobertura
41º 6' 34.38'' , -5º 48' 22.02''
Idioma
Autor
Jaime Nuño González
Colaboradores
Sin información
Edificio Procedencia (Fuente)
País
España
Edificio (Relación)
Localidad
Aldearrodrigo
Municipio
Aldearrodrigo
Provincia
Salamanca
Comunidad
Castilla y León
País
España
Claves
Descripción
LA IGLESIA DE SAN MIGUEL se halla dentro del casco urbano, en medio de una pequeña plazoleta a la que da nombre. Se trata de un edificio de origen románico transformado casi por completo en época renacentista. Consta de una sola nave de dos tramos separados por un arco de medio punto y una capilla mayor de planta cuadrada a la que se accede por un arco triunfal apuntado. A los pies de la nave se levantó una espadaña de cronología postmedieval, al igual que el pórtico adosado en el lado meridional. Entre los vestigios románicos conservados de la vieja fábrica románica destacan siete canecillos de escaso mérito artístico colocados en el muro norte de la cabecera. El deficiente estado de conservación y la tosquedad de su talla dificultan considerablemente la interpretación de los motivos que los decoran, entre los que a duras penas se distinguen sencillas formas geométricas realizadas con suma torpeza. Entre dos gruesos contrafuertes del muro norte de la nave se abría una portada también románica -actualmente cegada- formada por un sencillo arco de medio punto todavía perceptible. Se aprecia claramente cómo todo este muro septentrional fue re aprovechado de la antigua iglesia, recreciéndolo más de un metro por encima de la altura original cuando se hizo la reforma barroca. En el Libro de los lugares y aldeas del Obispado de Salamanca (Manuscrito de 1 6 0 4 - 1 6 2 9 ) consta que Aldearrodrigo tenía una iglesia “vieja y maltratada” que a buen seguro se corre s p o n d í a con el edificio románico que poco tiempo después fue completamente reformado. Hay que señalar también que en el lado meridional, en el muro donde se abre la puerta actual, aparece otra portada cegada y una piedra que sobresale de la pared a la altura de la techumbre del pórtico y que podría corresponder a un antiguo canecillo románico mutilado. Resulta complicado asignar una cronología precisa a unos restos tan poco significativos, máxime cuando a la simplicidad de la labra se une un deficiente estado de conservación de los elementos. Aun así no creemos aventurado apostar en este caso por una datación tardía, en torno a los primeros años del siglo XIII.